Emanuel Ginóbili puede comenzar a marcar en su agenda deportiva que volverá a jugar los playoffs de otra temporada regular en la NBA. Restan cinco partidos en el camino de San Antonio y, gracias a la victoria de este domingo ante Houston por 100-83, todo indica que los transitará con la calma necesaria para encarar la postemporada.
Los Spurs se afirmaron en el cuarto puesto de la Conferencia Oeste con un récord de 45 triunfos y 32 caídas, y respiran luego de un marzo que los había tenido a maltraer. Fueron claves los seis triunfos como locales y, luego de las derrotas de visitante ante Milwaukee y Washington, el equipo se recuperó frente a Oklahoma City y Houston.
A los Rockets los dejaron en su peor producción ofensiva de la temporada gracias a una defensa exigente, a un comienzo demoledor en el último cuarto, a la ausencia del lesionado Chris Paul y a un James Harden más controlado, autor de “apenas” 25 puntos en 36 minutos.
LaMarcus Aldridge volvió a descollar para San Antonio, con otro doble-doble: 23 puntos (11-19 dobles y 1-1 libre) y 14 rebotes en 36 minutos. Rudy Gay aportó 21 tantos (9-12 dobles) y Patty Mills sumó 14 más 5 rebotes.
Ginóbili contribuyó con 6 puntos (1-2 dobles, 1-1 triple y 1-3 libres) en 20 minutos, además de bajar 2 rebotes y dar 4 asistencias.